Cuando el chino llama a la puerta. Es el momento adecuado para aprender chino
Hola, me llamo Rafael Merinero y soy el Director General de la filial ibérica del Grupo Witzenmann. Soy especialista en Robótica e Inteligencia Artificial, habiendo trabajado previamente durante 10 años como Director de Operaciones.
Nuestro grupo trabaja con y para marcas líderes de la industria y el automóvil, y cuenta con fábricas y filiales en Shanghai y Jiangyin.
Antes de tomar la decisión de estudiar chino, había sopesado y formulado preguntas repetidamente durante tres años enteros hasta encontrar por fin el camino. De hecho, todo empezó con un pensamiento aparentemente sencillo, pero en realidad profundo:
¿por qué en China, miles de años de civilización han sobrevivido a las tormentas y ahora son aún más deslumbrantes? ¡Hay que atribuirlo a la grandeza de la civilización y al poder del idioma! El idioma es el alma de la civilización, pero también el mensajero a través del tiempo. Así pues, la respuesta salta a la vista: para aprender una cultura, ¡hay que abrir la puerta de su idioma！
¿Por qué aprender chino？
Para quienes somos decididos y ambiciosos a largo plazo, no sólo es una aventura de crecimiento personal y profesional, sino también una gran misión indispensable. Tres años después, por fin he encontrado la respuesta: el idioma chino, ¡la clave!
Así que empecé a visitar a mis amigos y colegas chinos, a menudo manteniendo largas conversaciones con ellos, deleitándome con muchos clásicos chinos y aspectos culturales, y no veía el momento de viajar a China de nuevo para pisar esta tierra ardiente y experimentar el acogedor encanto de China. Desde el desconocimiento inicial hasta la embriaguez posterior, estaba sediento de conocimientos. Como dice el refrán chino: «Aprende para conocer las carencias. Enseña para conocer las dificultades». Esta es la filosofía china que comparto con mi equipo. Me siento constantemente fortalecido y motivado en este mundo nuevo y maravilloso.
Desde el punto de vista del desarrollo profesional, China avanza con paso firme hacia el liderazgo mundial a través de una sabiduría deliberada y una estrategia coherente y sostenida.
Lo mismo puede decirse del crecimiento personal: la educación es la piedra angular del proyecto de futuro a largo plazo de una persona. Desde el punto de vista de cultura, una nueva lengua es una nueva ventana al mundo.
Además, también es una aventura de equipo. Aprendiendo chino, podemos empezar de cero, crecer juntos, compartir dificultades y risas unos con otros, y hacer nuevos avances en nuestras trayectorias profesionales, y la cohesión de equipo que se desarrolla como resultado será sin duda duradera y profunda.
Ahora bien, cuando hube definido claramente «qué aprender», «por qué aprender», «quién aprender» y «cómo aprender», la última pieza del rompecabezas también encajó: ¿cuándo empezar? La respuesta fue clara: ¡ahora!
Aprovechar la oportunidad
Los principales analistas geoestratégicos predicen que el panorama del liderazgo y el poder mundiales se determinará en la próxima década.
Recordando cuando era niño en casa de mis padres, leí el libro «Cuando China despierte, el mundo temblará», título basado en una famosa frase de Napoleón Bonaparte y, hoy, la profecía se está haciendo realidad. En este momento, estoy aún más convencido de que la inversión en conocimiento es una prioridad absoluta. El idioma chino, malentendido por los prejuicios occidentales como oscura y difícil de entender, en realidad no es tan complicada como pensamos. Como en cualquier proceso de aprendizaje, lo único que se necesita es tiempo y perseverancia.
Asociación con el Instituto Confucio de Madrid
¡El presente es el momento de empezar! Cuando el tren del futuro pasa por delante, sólo aquellos que estén bien preparados pueden subirse a él. Así que, con estos pensamientos en mente, a finales de 2024, nuestro equipo, junto con el Instituto Confucio de Madrid, emprendió un viaje que comenzó con la primera lección de HSK. Como era de esperar, volvimos a ser estudiantes, a los tiempos más sencillos y felices, disfrutando todos juntos de la alegría del aula.
Y con ayuda de la profesora Aria (马萌萌, Ma Mengmeng) he elegido mi propio nombre chino, que tiene un profundo significado: «励勇智». «励/Lì” significa inspirar, « 勇/Yǒng» significa avanzar y « 智/Zhì” significa sabiduría y comprensión. No se trata sólo de un nombre, sino también de un espejo que refleja mi visión del futuro y anuncia el comienzo de un nuevo viaje en el que el idioma es el barco y la cultura el puerto. ¡Brindo por la honestidad, la sed de conocimiento, la búsqueda de oportunidades y un viaje juntos con el idioma chino como vehículo!
励勇智
